Retrato inacabado de una pasión.
Toda vida tiene capítulos oscuros que en ocasiones no se conocen y en otras se revelan sólo tras la muerte.
París, una mañana cualquiera. Un secreto por desvelar y unos versos como epílogo de un amor… La muerte inesperada de Lourdes, esposa, pintora, madre y amante, sacude las vidas de todos los que la rodearon. El legado póstumo que le deja a su hija descubre a una mujer que no era lo que parecía: no amaba al hombre al que estuvo unida veintiún años y su vida aparentemente perfecta era, en realidad, como una prisión… Lourdes hace partícipe a su hija, Carmen, de la pasión que vivió con un hombre más joven que ella, Santiago, un pintor autodidacta de fuerte carácter y convicciones, lo que le proporcionará a Carmen las claves para afrontar su futuro con independencia y valentía. Ésta es la historia de un secreto y de un cuadro sin acabar de infidelidad y silencios, donde la pintura es el elemento que nos muestra cómo son y cómo sienten cada uno de sus protagonistas, es el reflejo de sus personalidades y modos de vivir entre los rojos de pasiones encendidas y los grises de la vida cotidiana.
La nueva y sorprendente novela de Nieves Herrero nos descubre la fuerza de una voz narrativa madura y llena de matices, que utiliza el arte como hilo conductor en este intenso relato.
A última hora de la tarde, al acabar la promo, acompañé a Nieves a ver la Catedral y a dar un paseo por la Rúa do Vilar, entramos en una joyería donde compró dos colgantes de porcelana, uno para ella y otro para mi, que me regaló como recuerdo de amistad.
María Arias, Nieves Herrero y Ángeles Rodríguez
In Memoriam
Mi amiga, Ángeles Rodríguez se acercó al Hostal de los Reyes Católicos a entrevistar a Nieves Herrero para la agenda cultural de Punto Radio. Colaboradora habitual en los medios de comunicación compostelanos, Ángeles era una persona muy conocida y querida en la ciudad. Recuerdo su voz, al otro lado del hilo telefónico, desde su puesto de telefonista en el ayuntamiento de Santiago de Compostela, siempre tan atenta, cariñosa y eficaz. El día 6 de junio de 2009 se fue para siempre. Su muerte dejó un silencio mustio y triste en todas las personas que la queríamos. Un beso grande.
Nieves Herrero con Ángeles Rodríguez
ENTREVISTAS
La Voz de Galicia: Concha Pino
21.12.2005
Titular: “No soy nostálgica, me pone las pilas el empezar de cero”
La popular periodista asegura que añora la radio, porque la televisión le parece fascinante, “pero en estos momentos no sabría como encajarme”
La popular periodista Nieves Herrero estuvo ayer en Santiago para promocionar su segunda novela, Todo fue nada, editada por MR ediciones al igual que la primera, Esa luna rota. En estos momentos dirige el proyecto digital MDM (Madrid Digital Multimedia) y es profesora de radio y televisión en la Universidad Villanueva, en Madrid. Y en enero tendrá en la calle un nuevo libro que acaba de escribir con Almudena de Arteaga, Leonor. Está dedicado a la infanta. “pero situándola en la historia; yo abordo el marco actual y Almudena, las Leonores que hubo en la historia”.
¿Qué cuenta en esta nueva novela?
Es la historia de una pintora, está casada desde hace 21 años, que se enamora locamente de un hombre más joven que llena de color su vida gris, correcta y aparentemente feliz. Pero no sabe que hacer, prisionera en su papel de madre.
¿Analiza a la mujer desde la experiencia propia?
La protagonista, de 51 años, pertenece a una generación que ante todo son madres. Por eso le dedico la novela a mi madre. Las nuevas generaciones son menos políticamente correctas. Yo no alcanzo ese punto, pero ser madre me condiciona mucho y me siento identificada con cosas que le pasan a mi protagonista.
¿El periodismo es su mejor recurso?
Tengo muchas historias que pueden dar lugar a una novela. Hice periodismo para escribir. Se me daba bien escribir y que creí que mi profesión iba a mitigar el gusanillo. Por eso acepté cuando me propusieron la primera novela. Esta es distinta, más madura, porque creo que empiezo a encontrar mi camino.
¿Seguirá con temas de pareja?
No, Estoy trabajando en una novela muy distinta, pero aún tardaré en escribirla, porque estoy investigando.
¿Añora la televisión?
Añoro más la radio. Ahora que estoy en plena promoción me doy cuenta de que en la tele todo es muy rápido, porque se te va la audiencia. Me gustan las entrevistas sosegadas. La tele es fascinante, pero ahora mismo no sé como encajarme. No soy nostálgica ni me aferro a nada, estoy dispuesta a la mudanza y al cambio. Me pone las pilas empezar de cero.
¿Y si tuviera que elegir entre radio y televisión?
No lo sé, es como si te dicen papá o mamá. La tele me dio popularidad, pero la radio es el gota a gota, crea.
Concha Pino y Nieves Herrero
ABC: Ana Martínez
21.12.2005
Titular: Nieves Herrero “Mis lectores sienten que comparten un hijo”
Es afectuosa, cortés, sencilla y muy familiar. “¿sabes que mi hija se llama Ana, como tú? Si os parecéis, seguramente serás muy inquieta e inteligente. Estoy segura. Porque una tía mía, que se llama así, lo es. Y es que, en mi opinión, el nombre imprime carácter”. Me lo dice al final del cuestionario, después de hablar de su última obra “Todo fue nada” y de su manifiesto amor por Galicia.
¿Cuál es el hilo conductor de su novela?
Son dos. El primero, la muerte inesperada de Lourdes, esposa, pintora, madre y amante, que sacudirá la existencia de todos los que en vida la rodearon. La razón: que el legado póstumo que le deja a su hija sacará a la luz a una mujer que, simplemente, no era lo que parecía; ni amaba al hombre al que estuvo unida 21 años, ni su vida era perfecta, sino más bien una prisión. El Segundo, la pintura, presente en creadores, lienzos colores, el realismo, lo abstracto, las discusiones, las diferentes maneras de ver el mundo…
¿Por qué la pintura?
Siempre la he amado. ¡Fíjate!, desde que era una niña. Yo nunca pedía muñecas, siempre quería colores. Mi mejor regalo era, de hecho, un estuche. ¡Vaya, lo mimaba tanto, hasta el año siguiente, cuando ya me tenían preparado otro! Los colores han estado siempre muy presentes en mi vida. Hoy en día, mi casa es de color naranja fosforito mezclado con blanco, el grueso es así, pero luego cada habitación está pintada de diferente manera: la de mis hijas es verde, la mía azul, la de mi madre amarilla.
¿Qué es más difícil, pintar, escribir o conducir un programa radiofónico?
Escribir. Requiere mucho esfuerzo, pero para mí se ha convertido ya en una necesidad.
Repetirá experiencia, entonces.
Si, de hecho ya estoy metida en mi tercera novela.
¿Literatura y radio tienen puntos en común?
En la radio me encontré con muchas inquietudes a nivel literario: poetas, cinéfilos… Y me entró el gusanillo. Hace cuatro años escribí mi primera novela, ahora la segunda, dentro de poco presento mi tercer libro…Me siento muy feliz.
¿Cuánto tiempo ha dedicado a “Todo fue nada”?
Cuatro años ocupó mi cabeza, pero la empecé de una manera, luego no la pude continuar…, en su elaboración emplearía unos doce meses.
¿Y de dónde saca el tiempo con lo polifacética que es usted?
(Risas) Je, je, pues ni yo misma lo sé. La falta de tiempo va ligada a mi personalidad. Soy muy zarza, amo mi trabajo, me encanta hablar con la gente, me cuesta despedirme de los sitios muchísimo…
¿De Compostela también?
Claro. Santiago me encanta, con su plaza del Obradoiro, el Hostal de los Reyes Católicos… En este viaje, además tuve la suerte de coincidir con un día bonito. Llegué con un sol impresionante, un azul cielo preciosos, una luz intensa, múltiples contrastes, ese gris de las piedras… pero si con algo me quedo es con la gente que vive aquí, contigo también. Hoy me encontré con varias personas que al leerme sienten que comparten un hijo. Es maravilloso.
El Correo Gallego: Xurxo Fernández
La Rosa de los Vientos
26.12.2005
Titular: Los Días de la literatura romántica
Insistimos nuevamente en la importancia del amor ideal como tema. De Goethe a Nieves, la pasión sigue de moda.
En el momento álgido del romanticismo, salió a la luz Las tribulaciones del Joven Werther. La firmaba Johann Wolfgang von Goethe. La impresión que generó fue tremenda. Los amantes despechados o insatisfechos se vieron reflejados en ese espejo mágico bruñido por el poeta de Weimar, y se desató una ola de suicidios a lo largo de Europa.
Ya antes la gente gustaba de leer de amores, y los tirajes de libros como Abelardo y Eloisa o El Pastor de Filida (de Montalvo, una de las preferidas de Cervantes) alcanzaron cifras nunca antes soñadas.
Sigue la racha hoy. El último ejemplo es esta aventura que ha publicado MR y firma Nieves Herrero. Es Todo fue nada.
Subrepticiamente, se manifiesta el arte. Una querencia inicial a Picasso, del que fue desencantándose la autora. Y Goya, que forma una especie de inquietante telón de fondo a lo largo de una trama cosmopolita: Madrid, Londres, París…
La pasión está servida…
Xurxo Fernández con Nieves Herrero
Faro de Vigo: Carmen Villar
21.12.2005
Titular: “Si volviera a nacer, me gustaría dedicarme a pintar”
Es un referente en radio y televisión en sus más de 25 años de carrera, pero ahora comienza a hacerse también un hueco entre las letras. Tras “Esa luna rota”, Nieves Herrero repite con “Todo fue nada”, el “retrato inacabado de una pasión” entre pintores. La autora estuvo en Santiago para apadrinar personalmente su nueva criatura.
¿Tuvo que aprender mucho de pintura?
La verdad que un poquillo. De todas formas, siempre me ha gustado mucho, es una de mis pasiones y creo que es mi asignatura pendiente.
¿No estará pensando en liarse los pinceles a la cabeza?
Yo creo que ya me pilla tarde. Si volviera a nacer, me gustaría mucho. Creo que todo depende del camino que cojas. A mi se me daba bien pintar, pero no lo desarrollé. Pinté lo típico de cuando eres pequeña, pero si hubiera desarrollado ese lado, no sé, tampoco creo que fuese muy buena pintora. Yo creo que hay que tener un punto de genialidad.
¿Cuál es su pintor favorito? ¿El Greco, como le ocurre a una de sus protagonistas?
Más que el Greco, me gusta Picasso, pero el Greco es de los que he descubierto con la novela. No sabía que era tan precursor de las vanguardias. Este libro me ha hecho pararme en pintores que no eran mis preferidos y uno de los que me he enamorado es el Greco, pero mi tótem es Picasso.
Pero él es uno de esos genios de los que habla que no eran demasiado aptos para la salud mental de las mujeres que caían en sus redes…
Es verdad que creo que los genios, cuando son viscerales, y lo tienen que ser porque lo da el vivir apasionadamente lo que estás haciendo, se fijan poco en las personas que tienen alrededor y eso le ha pasado a Picasso y a otros muchos. Es muy difícil vivir con un genio. A mi no me gustaría enamorarme de un pintor. Admiro y soy amiga de muchos, pero creo que seguirles es muy complicado, como puede ser también seguir a un escritor o a un periodista. Creo que son profesiones en las que te puede venir la inspiración en cualquier momento.
Pero el amor no sólo es difícil para esta clase de parejas, según el libro. En él baraja dos definiciones de amor, una que se refiere al cariño basado en el respeto y otra que subraya la pasión. ¿Con cual se queda? ¿Qué es el amor?
La palabra respeto de entrada me gusta mucho pero el respeto sin pasión me da mucha pereza. Creo que el amor tiene que tener gotas de pasión, si no, estamos hablando de convivencia, de compañerismo, de hermanos, pero el amor no es de hermanos, el amor es algo visceral, no puede darte igual, tiene que haber un gusanillo por el estómago. A lo mejor el amor es tener mariposas en le estómago cuando ves a la persona que quieres. Es difícil, pero no imposible, que duren toda la vida. El amor hay que alimentarlo y no podemos acomodarnos ante situaciones que están muertas. Lo que quiero reclamar es que la gente viva de verdad, no de apariencias.
¿Eso tiene que ver con lo que dice de que la gran mentira es la paradójica gran verdad entre las parejas?
Por eso mi reclamación desde el libro es que se viva de verdad, que ya está bien de tanta mentira.
Una de sus protagonistas persigue llegar a su Ítaca personal. ¿Nieves Herrero lo ha logrado o todavía está de viaje?
No, no he llegado. Aunque estoy esperando llegar cualquier año de estos. Quizá sea eso lo que me mantiene viva, el pensar que todavía no la he descubierto y que tengo que descubrirla. Siempre me queda algo en el camino para llegar. Parece que está cerca, pero a la vez está muy lejos. Siempre estoy de viaje. Siempre tengo mi corazón en la mochila, como ese Labordeta al que admiro mucho, pensando que cualquier día de estos voy a sentarme un poquito, pero no hay manera.
“No he enterrado a la niña que llevo dentro”
Para ser artista, ¿hay que estar un poco loco?
Sí, para ser artista hay que tener un punto de locura.
¿Para escribir también?
Claro, todo lo que tiene que ver con las musas tiene que tener un punto de locura, un punto como febril, aunque depende mucho también de cómo estés a nivel personal. Si eres feliz, te surge todo. Igual que lo contrario. Los extremos son momentos creativos.
Su otra protagonista, Carmen, afirma que el ser humano es perverso. ¿Es usted tan pesimista como ella?
Creo que el ser humano tiene dos caras: un lado absolutamente bondadoso y uno perverso. Carmen está muy desanimada y sólo ve el lado perverso y yo la entiendo porque a veces ocurre. Yo suelo ver la botella medio llena casi siempre, pero también vives con unos ojos de inocencia que a veces no concuerdan con tu edad. Yo no he enterrado a la niña que llevo dentro. Siempre me he ilusionado con poco.
Afirma que la suerte del artista es que no muere nunca, que alcanza la eternidad. ¿No es también la pretensión de un escritor?
Sí, pero el libro tiene que ser muy bueno o el cuadro muy bueno para alcanzar la genialidad toca la eternidad, pero sólo lo consiguen los privilegiados.
Agencia EFE: Juan Rodil
20.12.2005
Titular: “Todo fue nada”, el último libro de la periodista y escritora Nieves Herrero, ha sido definido por la propia autora como una historia de “intriga” y llena de “secretos”.
Nieves Herrero, en declaraciones a EFE, afirmó que tantas intrigas en su novela obedecen a que el personaje protagonista, Carmen, descubre a la muerte de su madre, Lourdes, que esta era una autentica desconocida.
“Había conocido una faceta de su vida pero había otra que se había mantenido oculta”, manifestó la autora.
En “Todo fue nada”, la muerte inesperada de Lourdes, esposa, pintora, madre y amante, sacudirá las vidas de todos los que la rodearon.
Herrero dice que el legado póstumo que le dejará a su hija descubrirán a una mujer que no era lo que parecía: no amaba al hombre al que estuvo unida veintiún años y su vida, aparentemente perfecta era, en realidad como una prisión.
Sin embargo, y pese a haber muerto, el personaje más vivo de la novela, a juicio de la escritora, es la madre, pues está permanentemente presente a través de las cartas y diarios que deja a su hija.
El título de la obra, “Todo fue nada”·, está extraído del poema “Vida” de José Hierro, y Herrero explica que los conceptos del todo y la nada la ha permitido jugar con los personajes, “que se mueven –dijo- en una historia de amor que puede ser todo o puede ser nada; en duda permanente”.
La autora utiliza en este relato el arte, y más concretamente la pintura, como hilo conductor; de hecho, en la obra existen constantes referencias a la pintura, porque la escritora “quería escribir un libro en el que la pintura fuese el nexo de unión de los personajes”.
Como amante de la pintura, la escritora comentó que quería escribir una novela dedicada a los pintores, y en la obra aparecen referencias a Picasso, Goya o Velázquez.
Nieves Herrero anunció que a mediados del próximo mes de enero saldrá a la venta el libro titulado “Leonor: ¿ha nacido una reina?”, una obra que escribió en colaboración con la abogada e historiadora Almudena de Arteaga.
La escritora señaló que el gran acontecimiento de 2005, el nacimiento de la Infanta Leonor, hija de los Príncipes de Asturias, queda retratado en este libro en el que se abren las puertas del pasado y del futuro.
Nieves Herrero elabora la crónica social del nacimiento de la Infanta y las implicaciones políticas y constitucionales del mismo, así como otras curiosidades del nacimiento y bautismo, mientras Almudena de Arteaga rastrea la historia de España en busca de reinas, princesas y otras mujeres influyentes llamadas Leonor.
Nieves Herrero y Juan Rodil
Nieves Herrero y Amelia González
Alejandro Macias de Localia y Nieves Herrero
Nieves Herrero delante de la fachada de Platerias de la Catedral